viernes, 30 de mayo de 2014

Eliminar vacios informativos: premisa de la prensa cubana


Los vacíos informativos en la prensa cubana deben eliminarse para no darle espacio al  enemigo, afirmó hoy en Ciego de Ávila, Rolando Alfonso Borges, jefe de Departamento del Comité Central del Partido Comunista de Cuba.
 Durante un encuentro con periodistas avileños, el dirigente abogó por continuar la batalla contra el secretismo, tarea en la cual deben contribuir igualmente los organismos y empresas.
Cumplir esa responsabilidad en los medios de difusión, con objetividad y calidad, es satisfacer las necesidades divulgativas de la población, agregó Alfonso.
Insistió en que el periodismo es un arma del Partido, de la Revolución y del pueblo, por lo que hay que utilizarla con efectividad, en cumplimiento de los acuerdos del IX Congreso de los periodistas cubanos.
Antonio Moltó, presidente de la Unión de Periodistas de Cuba, llamó a emplear argumentos convincentes en  respaldo a las políticas de desarrollo económico y social del país, lo cual significa un gran aporte de los hombres y mujeres dedicados a esa profesión.
Luis Raúl Vázquez Muñoz, corresponsal de Juventud Rebelde, indicó  que para ser más creíble en la labor reporteril es necesario la constante superación profesional.
 Abundando en el tema del secretismo, Vázquez Muñoz recordó la escasez de cepillos dentales de principios de año, cuya industria nacional radica en Ciego de Ávila, donde sus directivos explicaron que no estaban autorizados a dar datos productivos. 
 José Aurelio Paz, del semanario Invasor, refirió que a  veces los medios oficiales no divulgan una noticia que, sin embargo, esta es dada a su manera por blogueros sin la adecuada investigación.
 En la asamblea se puntualizó la importancia de los debates radiotelevisivos sobre asuntos que inquietan al pueblo, y entre ellos se destacaron la emisora provincial Radio Surco y la Televisión Avileña.
Félix Duarte Ortega, miembro del CC del PCC y primer secretario en la provincia, convocó a ser más exigentes con las fuentes que tratan de esconder información.
La tarea reporteril, aseveró Duarte Ortega, también requiere mayor comunicación entre dirigentes y dirigidos, organismos y prensa, para facilitar mejor el desarrollo de los cambios actuales en lo económico y lo social.  
Por. Julio Juan Leandro


martes, 27 de mayo de 2014

No solo es Zunzuneo



Nuestra población y la opinión pública norteamericana e internacional han recibido en las últimas semanas abundante información sobre las revelaciones que la agencia de prensa estadounidense Associated Press (AP) realizó el pasado 3 de abril acerca de “Zunzuneo”, proyecto ilegal diseñado, financiado e implementado por el Gobierno de Estados Unidos para subvertir el orden interno en Cuba.
El artículo de AP titulado “Estados Unidos creó secretamente un ‘Twitter cubano’ para provocar inestabilidad”, permitió confirmar la implicación directa del Gobierno de Estados Unidos, a través de la Agencia para el Desarrollo Internacional (USAID), en la planeación, financiamiento y ejecución de este proyecto clandestino, consistente en la creación de una plataforma especial de servicios de telecomunicaciones ilícitos hacia Cuba desde el exterior, con el objetivo de enviar a usuarios cubanos mensajes de contenido político para influir en sus posiciones y alentarlos a actuar en contra del gobierno.
El carácter secreto de este proyecto quedó en evidencia al conocerse que fue ejecutado a través del empleo de una extensa red de contratistas privados, empresas fachada, servidores informáticos y cuentas bancarias en varios países, con el propósito deliberado de ocultar la participación activa de agencias gubernamentales norteamericanas en su consecución.
No hay dudas de que estamos en presencia de una operación encubierta que, según la definición contenida en la legislación norteamericana, en particular en la Ley de Autorización de Gastos de Inteligencia de 1991, significa cualquier actividad del Gobierno de EE.UU., para influir en las condiciones políticas, económicas o militares en el exterior, que se realice de manera tal que el papel de ese gobierno no sea evidente o se reconozca públicamente.
Al respecto, llama la atención que este proyecto viola la letra de la legislación norteamericana sobre las operaciones encubiertas, que establece que el Presidente debe aprobar previamente por escrito este tipo de actividades y que las agencias involucradas deben informar íntegramente al Congreso sobre su implementación, algo que no ocurrió en este caso.
La concepción y puesta en práctica de este proyecto, que ha tenido una gran repercusión en Estados Unidos y otros países, sobre todo en aquellos cuyos territorios fueron usados sin su anuencia para esta afrenta contra Cuba, constituye una violación flagrante de la soberanía de nuestro país.
Infringe, además, las regulaciones internacionales referidas al uso de mensajes Spam y a la privacidad de la información y las comunicaciones personales, al apoyarse en la obtención ilegal de datos de usuarios cubanos y en el envío de mensajes SMS a sus celulares, sin su conocimiento y consentimiento previo. El Reglamento de Telecomunicaciones Internacionales, adoptado en diciembre del 2012, en el marco de la Conferencia Mundial de Telecomunicaciones Internacionales, establece en su artículo 5B que los estados miembros deben procurar tomar las medidas necesarias para evitar la propagación de comunicaciones electrónicas masivas no solicitadas y minimizar sus efectos en los servicios internacionales de telecomunicaciones y los alienta a cooperar en este sentido.
Vale señalar que el Gobierno de EE.UU., nunca permitiría la ejecución de un proyecto como “Zunzuneo” en su territorio, sin autorización expresa. Hacer algo así violaría las leyes anti-Spam, que protegen a los usuarios de telefonía móvil de la recepción de mensajes no deseados, así como las que prohíben de manera absoluta la realización de actividades políticas, incluyendo la promoción de material informativo de corte político en función de los intereses de un Estado o institución extranjera, si la persona o entidad que pretende realizarlas no se registra ante el Departamento de Justicia como agente extranjero.
Las informaciones expuestas por la agencia AP sobre “Zunzuneo” confirman las reiteradas denuncias del gobierno cubano y demuestran, una vez más, que el Gobierno de Estados Unidos no ha renunciado a sus planes subversivos contra Cuba, que tienen como objetivo crear situaciones de desestabilización en el país para provocar cambios en su ordenamiento político, económico y social, y a los cuales continúa destinando presupuestos multimillonarios cada año, que desde que fueran oficialmente instituidos, en virtud de la sección 109 de la Ley Helms-Burton de 1996, superan la cifra de los 260 millones de dólares, de los cuales, más de 95 millones han sido aprobados durante el mandato del presidente Barack Obama.
Pero “Zunzuneo” no es el único programa de esta naturaleza que se ha diseñado por el Gobierno de EE.UU., contra Cuba en fecha reciente. Los fondos millonarios del Programa Cuba de la USAID han sido destinados para iniciativas similares como “Conmotion”, herramienta desarrollada por el Instituto de Tecnología Abierta (OTI) de la New America Foundation, con sede en Washington, originalmente para uso militar, y que consiste en la creación de redes inalámbricas independientes en forma de “malla” para enlazarse con el exterior, fuera de cualquier control gubernamental, lo cual permite desinformar a los usuarios sobre la situación en su país y convocarlos a manifestaciones.
Otras entidades del Gobierno de EE.UU., como la Oficina de Transmisiones a Cuba, implementan proyectos ilegales como “Piramideo”, que es también una plataforma de comunicación que promueve el envío de mensajes masivos a usuarios en nuestro país. A este tipo de iniciativas y a las emisoras Radio y TV “Martí”, le han sido asignados bajo el gobierno de Obama 142 millones de dólares del presupuesto federal, y más de 770 millones de dólares desde la fecha de su creación.
El Gobierno de EE.UU., brinda igualmente pleno respaldo al proyecto de la bloguera contrarrevolucionaria Yoani Sánchez, de crear un medio de prensa digital, el cual es financiado totalmente con dinero proveniente del exterior y tiene como propósito fundamental alimentar las campañas de desinformación y difamación contra Cuba.
Para justificar la ejecución y promoción de proyectos de esta naturaleza contra Cuba, el Gobierno de EE.UU., argumenta, entre otras razones, su interés en facilitar “el libre flujo de información al pueblo cubano”, cuando es el propio gobierno y el Congreso de ese país los que a lo largo de los años han promulgado leyes, regulaciones y políticas, que impiden precisamente el libre acceso a la información del pueblo de Cuba.
Entre las múltiples restricciones que EE.UU., impone al “libre flujo de la información”, se encuentran las siguientes:
• La política de bloqueo económico, comercial y financiero prohíbe las exportaciones de tecnología y equipamiento de telecomunicaciones.
• La Ley Torricelli de 1992 y la Ley Helms-Burton de 1996 prohíben cualquier tipo de inversión por parte de entidades estadounidenses en los servicios nacionales de telecomunicaciones de Cuba.
• El bloqueo también prohíbe a Cuba la adquisición de licencias de productos de software y niega el acceso de entidades y ciudadanos cubanos a sitios y a servicios en Internet, incluyendo sitios de información y herramientas técnicas como PC Tools y Netbeans; y otras aplicaciones. Nombres reconocidos mundialmente como Microsoft, Mozilla, Adobe, Sourceforge y Google, instrumentan desde la Red de redes las prohibiciones del Gobierno de Estados Unidos contra Cuba. En el caso de Google, los cubanos no pueden acceder a herramientas como Google Analytic, Google Earth, Google Decktop Search y Google Toolbar. Estas restricciones se hacen extensivas al uso de software libres y de su navegador más popular Sourceforge por parte de Cuba, lo cual viola las premisas de la Open Source Initiative, organización dedicada a la promoción del software libre: la no discriminación contra personas o grupos y la no discriminación contra esferas de actividad. Incluso, se impide el acceso desde Cuba a aplicaciones que son ofrecidas gratuitamente por sus autores en Internet, como son los casos de mathwork.com, ti.com, digikey.com, microchip.com y wmware.com.
• Cuba no puede conectarse a las decenas de cables submarinos de fibra óptica que circundan la isla, lo cual obliga al país a buscar alternativas más costosas para incrementar la conectividad a Internet. Paradójicamente, el Gobierno de EE.UU., ha anunciado sus planes de llevar un cable submarino hasta el territorio ilegalmente ocupado por la Base Naval en Guantánamo, en franca violación de la soberanía de Cuba.
• En virtud de la política de bloqueo, la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) del Departamento del Tesoro aplica sanciones a empresas de telecomunicaciones estadounidenses y extranjeras por prestar servicios a Cuba, como son los casos de las compañías LD Telecommunications Inc., de Florida, multada en el 2010 por 21 671 dólares; y Ericsson Panamá, sancionada en el 2012 por 1 750 000 dólares.
• El Gobierno de EE.UU., ha permitido que ETECSA, como sucesora de la Empresa de Telecomunicaciones de Cuba, EMTELCUBA, haya sido despojada de fondos depositados en bancos estadounidenses, resultantes de servicios prestados entre ambos países, los cuales fueron ilegalmente congelados como parte de la política de bloqueo.
• El Gobierno de EE.UU., es el único en el mundo que prohíbe a sus ciudadanos visitar Cuba libremente, con lo cual impide los contactos, los intercambios, la comunicación y “el libre flujo de información” entre ambos pueblos.
• La Ley Helms-Burton de 1996, en su sección 109, prohíbe todo tipo de asistencia a Cuba, salvo aquella que tenga como propósito promover la subversión interna.
El Gobierno de EE.UU., debe cesar sus acciones subversivas, injerencistas, ilegales y encubiertas contra Cuba, que atentan contra la estabilidad y el orden constitucional cubano, y respetar la soberanía cubana, el Derecho Internacional y los propósitos y principios de la Carta de las Naciones Unidas.
Cuba no tolerará ningún tipo de actividad subversiva ni de intromisión en sus asuntos internos y, como país soberano, continuará defendiéndose y denunciando la naturaleza injerencista de estos programas.
Por. Oscar Sánchez Serra

viernes, 23 de mayo de 2014

Reunión de la Presidencia de la Upec





La agenda del III Pleno del Comité Nacional de la Upec, que se realizará el próximo 12 de julio, quedó aprobada en la reunión mensual de la Presidencia de la organización, efectuada este jueves.
Los tres temas de ese encuentro serán: 1) Información sobre las asambleas de mayo y junio; 2) Información sobre las tesis hechas por los estudiantes de periodismo y su ubicación laboral; y 3) Ideas iniciales sobre modelo de gestión de la prensa en Cuba.
Aixa Hevia, vicepresidenta primera de la Upec, se refirió al proceso de asambleas provinciales y ramales a un año del IX Congreso, que se están efectuando a lo largo y ancho del país y que concluirán en junio, y puntualizó los principales planteamientos emanados de las cuatro primeras celebradas en Pinar del Río, Mayabeque, Artemisa y La Habana, con coincidencia en cuanto al aporte de los talleres creativos para examinar errores, deficiencias y carencias en cada medio a fin de acometer el periodismo veraz, oportuno y con altura que se demanda.
Igualmente afirmó que aunque la Upec ha estado insistiendo sobre la falta de estrategia comunicativa de la sociedad en su conjunto, tampoco nuestros medios de prensa cuentan con esa proyección.
La vicepresidenta Belkys Pérez Cruz, por su parte, contó sobre la visita de representantes del Ministerio de Educación Superior a la sede del Instituto Internacional de Periodismo José Martí (IIPJM) para validar el cumplimiento de los requisitos para mantener la condición de centro autorizado a impartir cursos de postgrados. Se cumplieron las formalidades y ahora se espera por los resultados de tal evaluación.
En tal sentido, el presidente Antonio Moltó precisó que esa actividad es bien importante para el Instituto, pero que ello no implica abandonar sus cotidianas acciones de superación gremial en cuanto a aspectos específicos del trabajo en las redacciones, como la corrección de estilo, las técnicas narrativas, el diseño y la infografía, la fotografía periodística, entre otros muchos cursos, talleres, conferencias, encuentros, que propenden a la elevación de la cultura y la preparación de los periodistas.
En el encuentro, Moltó también informó sobre algunas tareas internacionales, entre ellas los encuentros que sostuvo en la presente semana con periodistas holandeses y afroamericanos, y una reunión de trabajo que sostuvo con dirigentes del Partido y del Gobierno de la provincia de La Habana para enfrentar el problema de las indisciplinas sociales en la capital.
Habló, además, del fortalecimiento de los círculos especializados de Economía, Internacionales  y Jurídico-Parlamentario, así como de una actividad similar, que tendrá lugar mañana viernes, para reanimar el de Historia. Previamente, el presidente del Instituto de Historia de Cuba, René González Barrios, dictará una conferencia sobre el desmontaje de la Historia y la subversión contra Cuba.
Bárbara Doval, vicepresidenta, informó sobre el programa general del encuentro Género y Comunicación, que se desarrollará del 28 al 30 de mayo en el Hotel Nacional, una acción conjunta de la Upec y la Federación de Mujeres Cubanas. Delegaciones de varios países tomarán parte en ese encuentro iberoamericano. En el encuentro habrá varias conferencias magistrales: una a cargo de Angeles Díez (Género y manipulación mediática: los casos de Cuba y Venezuela), otra de Omar González, presidente de la Red en Defensa de la Humanidad, y otra impartida por Paulina Gabriela Mogrovejo, de Ecuador, quien consejera de la defensoría del pueblo en el Consejo de Regulación y Desarrollo de la Información y Comunicación de ese país sudamericano. También se presentará el libro  ¿Tiene cascabel el gato? Miradas al teleperiodismo cubano de la Revolución, de Maribel Acosta Damas.
La reunión de la Presidencia recibió una información sobre los resultados de la investigación realizada por una comisión, que integraron Enrique Villuendas, funcionario del Departamento ideológico, y Juan Carlos Ramírez, jefe del departamento de Organización de la Upec,  sobre los sucesos ocurridos el pasado 30 de marzo, en las afueras del estadio Sandino, en Santa Clara, donde el fotógrafo Ramón Pacheco, del periódico Girón, de Matanzas, fuera detenido en los momentos en que cumplía con su deber profesional.
Los resultados de tal investigación serán informados a Pacheco, a la Presidencia de la Upec en Matanzas, así como a las autoridades del Partido en esa provincia y en Villa Clara. Cubaperiodistas publicará posteriormente una nota sobre las conclusiones a que llegó la Comisión.
Cubaperiodistas.cu

lunes, 19 de mayo de 2014

Los grandes muertos son inmortales



A 119 años de la caída en combate de José Martí

A Patria correspondió confirmar la tristísima noticia de la caída en combate del mayor general José Martí: “ÚLTIMA HORA/ Al entrar en prensa el presente número recibimos la cruel certidumbre de que ya no existe el Apóstol ejemplar, el Maestro querido, el abnegado José Martí. Patria, reverente y atribulada, dedicará todo su número próximo a glorificar al patriota, a enaltecer al inmortal […]”. 
Fundado por José Martí, el organizador de la guerra necesaria, el periódico Patria, se hallaba entrañablemente unido a la labor del Partido Revolucionario Cubano en pro de alzar la contienda que independizaría a Cuba de la metrópoli española.  
Como se sabe, vio la luz por primera vez el 14 de marzo de 1892. Surgió para el combate y fue un abnegado soldado de la revolución. Reseñó el surgimiento del PRC —“La proclamación del Partido  Revolucionario Cubano el 10 de abril”, publicado el día 16 de abril de 1892—; sus objetivos, tareas y avances; semblanzas de los héroes y reseñas de reuniones, visitas, actividades… que hacían saltar de júbilo el corazón por el futuro de Cuba. Su principal redactor fue el propio Martí, que, en aras de la pronta salida de cada número, realizaba cualquier función, la que cada minuto requería. 
Luego de su partida de Nueva York, durante su estadía en República Dominicana y aun en la manigua redentora, fue para Martí una esencial preocupación el papel que tocaba desempeñar a Patria, como parte de la estrategia por él seguida para organizar y llevar a cabo la guerra necesaria. De ahí, sus continuas referencias al periódico en las cartas dirigidas a Gonzalo de Quesada y Benjamín Guerra, sus más cercanos colaboradores en el PRC, a quienes encargaba continuar velando por la unidad. 
Y es que para Martí, Patria debía ser la voz de la unidad revolucionaria de todos los cubanos, cualquiera que fuera su color, credo o concepción política, y aun de los españoles, aplatanados en esta tierra.  
De igual modo, les recalcaba la necesidad de reiterar continuamente, de una y mil formas, los conceptos claves reflejados en el Manifiesto de Montecristi y alegrar cada corazón cubano con relatos y anécdotas plenas de heroísmo. 
¿Cuál no sería el dolor que produjo la noticia de la muerte de Martí en Patria, la pena profunda que su fallecimiento produjo entre las filas de la emigración fortalecida con su labor, aquella emigración que lo había visto crecerse y multiplicarse? 
La muerte prematura de Martí, en Dos Ríos, el 19 de mayo de 1895, causó una honda angustia entre quienes luchaban por la independencia y veían en Martí el futuro de Cuba; ejemplo de ello son estas palabras escritas por el mayor general Máximo Gómez en su Diario de campaña: “Esta pérdida sensible del amigo, del compañero y del patriota […] abrumó mi espíritu a tal término, que dejando algunos tiradores sobre un enemigo que ya de seguro no podía derrotar, me retiré con el alma entristecida./ ¡Qué guerra esta! Pensaba yo por la noche que al lado de un instante de ligero placer, aparece otro de amarguísimo dolor. Ya nos falta el mejor de los compañeros y el alma, podemos decir, del levantamiento”.1 
La caída en combate del mayor general José Martí fue un duro golpe para la Revolución. Había muerto aquel que había sido capaz de penetrar desde muy temprano en la esencia imperialista y rapaz de Estados Unidos y planeaba la guerra “en silencio” para “impedir a tiempo con la independencia de Cuba que se extiendan por las antillas los Estados Unidos y caigan, con esa fuerza más, sobre nuestras tierras de América”.2 
Sin embargo, vale la pena recordar aquí a otro gran cubano, Nicolás Guillén, nuestro poeta nacional, quien en su “Elegía a Jesús Menéndez”, expresó proféticas palabras que reflejan la verdad de lo ocurrido con la muerte del Apóstol: “Los grandes muertos son inmortales: no mueren nunca. Parece que se marchan; parece que se los llevan, que se pudren, que se deshacen. Pensamos que la última tierra que les llena la boca va a enmudecerlos para siempre.  
Pero la lengua se les hincha, les crece; la lengua se les abre como una semilla bábara y expulsa un árbol gigantesco, un árbol duro, cargado de plumas y de nidos”.3 
Es cierto que en aquellos momentos, la pérdida de Martí —y luego la de Maceo—permitió que viejos desacuerdos salieran a flote y que el Consejo de Gobierno de la República de Cuba en Armas asumiera actitudes que el propio Martí había criticado con respecto a la Guerra Grande.
Es cierto que la pérdida de Martí —y de Maceo— facilitó que, con la intervención norteamericana, se les arrebatara el triunfo a los mambises.  
Pero también es cierto que el pensamiento martiano se ha convertido en guía para la acción y que a 119 de su caída en combate su semilla ha fructificado en la intransigencia revolucionaria de nuestro pueblo. 

 Por. María Luisa García Moreno