lunes, 23 de febrero de 2015

Díaz-Canel: Existe la voluntad de poner la Informatización y la Internet al servicio de todos



 

Existe la voluntad y disposición del Partido y el gobierno cubano de desarrollar la informatización de la sociedad y poner la Internet al servicio de todos y a lograr una inserción efectiva y auténtica de los cubanos en ese espacio, aseguró este viernes el primer vicepresidente Miguel Díaz-Canel Bermúdez.
El también miembro del Buró Político del Partido Comunista de Cuba, asistió a las conclusiones del Primer Taller de Informática y Ciberseguridad, que sesionó en La Habana, y en el que se propició “un debate honesto y sincero, crítico y justo, amplio y participativo, serio y comprometido, realista y objetivo, y también visionario”.
Es el inicio de una inmensa tarea estratégica que vamos a construir y que ya estamos construyendo, aseguró.
Díaz Canel aseguró que el tema que reunió a unos 250 expertos del país y que abrió un foro debate on line, es “complejo, no hay recetas ni una respuesta única y se necesita trabajar con visión de país y con la participación intersectorial, interdisciplinaria y abierta, que permita construir una estrategia nacional, que ponga a esta tecnología y a la infraestructura que debe acompañarle, al servicio de la construcción del socialismo próspero y sostenible que se pretende”.
“Un tema como este no puede verse desvinculado de los grandes temas a los que se enfrenta el país”, añadió.
Dijo que “en la medida que podamos tener más claro, mediante la construcción colectiva, el proyecto de país que queremos, estará mucho más clara la forma en que una herramienta como Internet puede ponerse a su servicio”.
Recordó al líder de la Revolución cubana, Fidel Castro, quien el 7 de marzo de 2006, en el acto por aniversario 15 del Palacio Central de Computación, afirmó que “la informática se convertirá en una poderosísima fuerza científica, económica y hasta política” para Cuba.
EL CAPITAL HUMANO DE LA REVOLUCIÓN ES INNEGABLE
Aseguró que el enorme capital humano formado por la Revolución es innegable y  constituye la principal fortaleza para enfrentar los desafíos y retos futuros. “Este evento ha visibilizado ese potencial”.
Llamó la atención sobre el hecho de que el bloqueo a Cuba -aunque algunos no lo quieran considerar- ha limitado el acceso a financiamientos, tecnologías, sistemas, infraestructuras, software y aplicaciones.
“El reconocimiento a su fracaso como política por parte del presidente Obama y el anuncio de que realizarán inversiones en el sector de las telecomunicaciones, para que el pueblo cubano pueda acceder a las mismas, es un reconocimiento de ello”, dijo Díaz Canel. 
El cambio de táctica, con similares propósitos de destruir la Revolución -añadió-, penetrando subversivamente en la sociedad, “también acentúa la necesidad de que avancemos más en el proceso de informatización”.
Recordó los planes de espionaje a gobiernos y personas utilizando de manera perversa estas tecnologías, y la denuncia pública de este tema que hiciera el presidente Raúl Castro en la inauguración de la II Cumbre de la CELAC, en La Habana, el 28 de enero de 2014.
SE HA HECHO MUCHO, PERO NO TODO LO QUE NECESITAMOS
“Se ha hecho mucho, pero no todo lo que necesitamos, ni de la manera más coherente, y por esta razón hablamos de informatización y ciberseguridad”, reconoció.
Es el marco propicio para plantear la voluntad del Partido y el Gobierno cubanos para pasar a un amplio proceso de informatización que garantice el uso amplio y seguro de la Internet, de manera inclusiva y función del desarrollo del país.
El Primer Vicepresidente aseguró que “el Estado trabajará para que este recurso esté disponible, accesible, costeable para todos”.
Dijo que “hay una responsabilidad del Estado y la sociedad para que eso se haga efectivo, y también presupone la convivencia con otros derechos fundamentales: el derecho a la información, la comunicación, la participación, la rendición social de cuentas, unida a la responsabilidad individual y colectiva”.
UN DERECHO Y UN DEBER
Díaz-Canel añadió que “el derecho a Internet se acompaña por tanto de los deberes del ciudadano y de las organizaciones e instituciones para con la sociedad. Es por tanto totalmente responsable reconocer que el derecho de todos a Internet supone deberes en relación con su uso adecuado y conforme a la Ley y supone también la responsabilidad de los órganos de control que velar por la defensa del país y su integridad”.
Añadió que la Internet debe ser ”Internet debe ser en una herramienta al servicio del desarrollo humano sostenible del país y su inserción efectiva en el concierto de naciones”.
Internet y el acceso a las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones en general, “ofrecen oportunidades para que las personas, las organizaciones y las comunidades puedan desarrollar su pleno potencial, promover su desarrollo sostenible y mejorar su calidad de vida”, dijo: ”Internet no resuelve los problemas por sí sola, pero puede ayudar a respaldar las estrategias en función del desarrollo social”.
“Son los problemas fundamentales de la sociedad, sus desafíos económicos, sociales y culturales los que deben estar en el centro de la estrategia y demandar el uso creativo e intensivo de Internet”, añadió el Vicepresidente.
PRINCIPIOS DEFINIDOS EN UN IMPORTANTÍSIMO Y CLARO DISCURSO 
Otras ideas de Miguel Díaz-Canel es este importantísimo discurso:
*El desarrollo de la Ciencia es inconcebible hoy sin Internet y la participación de nuestros científicos en las corrientes principales de la ciencia está mediada por la capacidad de acceder a una Internet de calidad.
*La estrategia de acceso a Internet debe ser diseñada, desarrollada e implementada sobre la base de la más amplia participación y para contribuir y potenciar el desarrollo humano sostenible, de lo contrario la fragmentación e irracionalidad de los procesos se multiplicarán.
*El acceso a Internet supone al mismo tiempo desafíos y oportunidades pero constituye una opción necesaria para el desarrollo de la sociedad en las condiciones contemporáneas.*La estrategia de acceso a Internet debe convertirse en un arma fundamental de los revolucionarios para lograr la participación social en la construcción del proyecto de sociedad que queremos, desde un diseño integral de país.
 *La estrategia de uso de Internet para el desarrollo humano sostenible, de acuerdo con el modelo de sociedad cubano, tiene que ser liderada por el Partido y debe involucrar a todas las instituciones y a la sociedad para lograr el más pleno uso de sus potencialidades en función del desarrollo nacional.
 *Internet como medio de acceso a la información y la comunicación impone desafíos a las formas hasta ahora prevalecientes de organización y participación social.
 *El socialismo le otorga un lugar preferencial al derecho a la información como condición para el pleno ejercicio de la crítica y la participación del pueblo.
*Internet plantea desafíos a las formas tradicionales de Comunicación Social, al uso de los medios de comunicación, al papel de los individuos en el espacio público y exige la existencia de políticas, normas y formas de funcionar nuevas, que deben alinear infraestructuras, servicios y contenidos para garantizar ese derecho.
*Internet además de un espacio de acceso a la información, es un espacio para la comunicación social, la cooperación, la asociación y el trabajo en sus más variadas manifestaciones y como tal debe favorecerse.
 *Las regulaciones de Internet deben ser coherentes con las normas, principios y políticas sociales y deben ser transparentes para todos los ciudadanos dejando claramente establecidos derechos y deberes.
 *Las regulaciones y normas que rigen el acceso a Internet y su uso deben ser coherentes con la legislación, y alinearse con los principios generales de la  constitución y demás leyes vigentes y ajustarse a las cambiantes necesidades del desarrollo social.
 *Internet es una herramienta al servicio de la identidad y la cultura nacional y de la inserción soberana y universal de los cubanos, incluida la soberanía tecnológica.
 *El fomento y universalización del acceso y uso de Internet debe formar parte del proceso de desarrollo cultural nacional en su más amplio sentido y deberá acompañarse del fomento de la producción cultural nacional, la promoción de sus valores y la más amplia difusión nacional e internacional.
*Es parte de la infraestructura básica para el desarrollo de las actividades económicas y empresariales del país y el desarrollo de las capacidades nacionales en este campo y al propio tiempo es una actividad económica con alto potencial de desarrollo.
 *En este contexto deberá fomentarse la creación de una infraestructura de Internet de acuerdo con nuestras posibilidades, que sirva de base para el desarrollo de las actividades económicas a todos los niveles, los estatales, las cooperativas y de los sectores cuentapropistas.
 *Internet tiene un potencial generador de servicios y de actividades económicas que constituyen ellas mismas fuentes generadoras de empleo y recursos y crecimiento económico.
 *Internet es una plataforma para el desarrollo nacional que está sujeta al control social.
 *Además de garantizar una gestión efectiva de sus recursos, es imprescindible establecer mecanismos de rendición de cuenta que permitan verificar en qué medida el uso de este recurso está en función de las metas de desarrollo del país y del mejoramiento de la calidad de vida de los cubanos.
*Es un deber y una responsabilidad administrativa de controlar que los recursos puestos en función de metas sociales se usen en esa dirección y que el uso de los recursos disponibles se pongan en función de apoyar las metas prioritarias de la nación.
PROBLEMAS RECONOCIDOS EN EL EVENTO
El miembro del Buró Político del Comité Central reconoció que durante el debate de este Primer Taller de Informatización y Ciberseguridad se ha reconocido: 
   * la ausencia de políticas,
   * la implementación lenta y carente de integridad,
   *la fragmentación,
   * la sectorialización;
   *el marco regulatorio fragmentado, sectorializado y desintegrado;
   *la ineficiencia de los servicios;
   *una determinada desprofesionalización y dispersión de los recursos humanos;
   *existencia de ilegalidades;
    *centralización del desarrollo de la infraestructura;
    *falta de transparencia en el uso de los recursos de la Internet cubana;
    *limitaciones en el acceso desde las instituciones;
    *dependencia tecnológica;
    *insuficiente dinámica en el desarrollo de servicios y contenidos.
    *complejidad en la aprobación del acceso a Internet a personas e instituciones.
Todos estos problemas, añadió Díaz-Canel, atentan contra el logro de una adecuada informatización de la sociedad.
Incluyó también como desafíos:
    *el aumento de la capacidad de los Centro de Datos Nacionales y los dispositivos de acceso,
    *una legislación nacional coherente,
    *Legislación nacional coherente y coherente con los principios ordenadores.
    *Educación en Internet y sobre Internet
    *Educación a través de Internet
    *Acceso al Conocimiento y la Cultura General Integral en Internet
    *Estándares libres y de código abierto
    *Participación Online en los asuntos públicos
    *Protección de los consumidores en Internet
    *Salud y los Servicios sociales estratégicos
    *Soluciones jurídicas y Judiciales de las actuaciones relacionadas con Internet
    *El tema audiovisual, que es el código fundamental de comunicación con las nuevas generaciones
    *La automatización, que tiene que responder a las problemáticas que plantea la situación demográfica…
CON TODOS Y PARA EL BIEN DE TODOS
El vicepresidente afirmó que solucionar estos problemas es el objetivo esencial de las bases, ejes estratégicos y prioridades de la estrategia de Informatización y Ciberseguridad de la nación cubana.
Reiteró que este sistema de trabajo es dirigido por la máxima instancia del Partido, del Estado y del Gobierno a través del Consejo de Informatización y Ciberseguridad creado hace dos años, con la misión de proteger, coordinar y controlar las políticas y estrategias integrales de este proceso.
En correspondencia con los riesgos y amenazas identificadas en el ciberespacio -añadió-, se diseñan acciones para proteger nuestra soberanía y afianzar la cooperación internacional en materia de ciberseguridad con otras naciones, como China y Rusia.
Aseguró que estos los debates del Taller y en el que se generó en la red, contribuirán a definir las acciones de trabajo a corto y mediano plazo en el país, y concluyó:
Solo la integración de la inteligencia colectiva, como resultado de la formación del capital humano creado en más de 55 años de Revolución permitirá alcanzar los resultados esperados.
La única forma en que Cuba puede integrarse soberanamente a la Internet es con una visión de nación y una infraestructura con servicios nacionales integrados que beneficien al universo de sus instituciones, organizaciones y ciudadanos. Necesitamos distinguirnos, como país socialista, por una Informatización y una Internet con todos y para el bien de todos.
No podemos temer a los desafíos que impone una red como Internet, no podemos renunciar al proyecto de una sociedad más justa, libre y democrática que sea el culto de los cubanos a la dignidad plena del hombre y que se haga efectiva en el contexto que nos ha tocado vivir.
La Informatización e Internet deberán acompañar la oportunidad de todos los cubanos de participar de forma activa en la construcción del país socialista, próspero y sostenible que compartimos en nuestras aspiraciones.
Trabajemos todos por lograr la necesaria informatización en la sociedad cubana. En esta batalla, también venceremos.
Fuente: Cubadebate.cu









domingo, 15 de febrero de 2015

Negociaciones entre Washington y La Habana




Por. Piero Gleijeses
A finales de 1988, como la distensión entre Washington y Moscú floreció, Fidel Castro le dijo al presidente de Angola, José Eduardo dos Santos: “No sabemos cómo los Estados Unidos van a interpretar la paz y la distensión, si será una paz para todos, la distensión para todos, la convivencia para todos, o si los norteamericanos interpretarán ‘convivencia’ como la paz con la Unión Soviética – la paz entre los poderosos – y la guerra contra el pequeño. Esto aún no se ha visto. Tenemos la intención de seguir siendo firmes, pero estamos dispuestos a mejorar las relaciones con Estados Unidos si hay una apertura”.
No hubo ninguna apertura. Para los próximos tres años, ya que la Unión Soviética estaba al borde del colapso, los funcionarios estadounidenses presionaron a Gorbachov para cortar toda la ayuda de Moscú a Cuba. El colapso de la Unión Soviética, en diciembre de 1991, significó que La Habana estaba sola, y en una situación económica desesperada. Washington endureció el embargo, lo que hizo más difícil posible para terceros países comerciar con Cuba. Los funcionarios estadounidenses esperaban que el hambre y la desesperación obligarían al pueblo cubano a volverse contra su gobierno. Incluso después de que se dieron cuenta de que el régimen cubano no se vendría abajo, todavía Bill Clinton, George W. Bush, y – hasta hace unos meses – Barack Obama continuaron el embargo.
¿Por qué tanto odio? Leycester Coltman, ex embajador británico en Cuba, escribió en 2003 que Fidel Castro era “todavía un hueso … atascado en la garganta de los estadounidenses. Ha desafiado y burlado a la única superpotencia del mundo, y no será perdonado”. Durante mucho tiempo funcionarios estadounidenses y expertos  hemos reflexionado sobre qué condiciones demandar de los cubanos desobedientes antes de que Washington se digne a levantar el embargo, olvidando que es Estados Unidos el que intentó asesinar a Castro, llevó a cabo acciones terroristas contra Cuba, y sigue ocupando territorio cubano – Guantánamo, el vil metal de 1898. La memoria selectiva permite a los estadounidenses transformar a Cuba en el agresor y los Estados Unidos en la víctima.
El reclamo persistente de funcionarios estadounidenses de que el embargo fue motivado por la preocupación por la democracia y los derechos humanos en Cuba era tan risible como deshonesto: Estados Unidos goza de excelentes relaciones con la escoria de la tierra, como Arabia Saudita; y con estados canallas como Israel, una potencia colonial cuyos asentamientos hacen una broma sórdida de la promesa de permitir la creación de un Estado palestino. No fue el amor a la democracia o la preocupación por el bienestar de los cubanos lo que motivó la política estadounidense. El voto de los cubanoamericanos y el deseo de venganza -nada más- explica la continuación del embargo. Por último, el presidente Obama ha dado un paso muy retrasado que marca el principio del fin de un capítulo vergonzoso de la política exterior de Estados Unidos. 
Es este capítulo sórdido el que Peter Kornbluh y William LeoGrande diseccionan. Back Channel to Cuba se centra en la “historia oculta de las negociaciones entre Washington y La Habana” desde Eisenhower hasta Obama. Los autores están bien cualificados para esta tarea. Han visitado Cuba una y otra vez en las últimas décadas, desarrollando un conocimiento profundo del país. Kornbluh ha escrito el mejor análisis de la política de Richard Nixon hacia el gobierno de Salvador Allende, y varios ensayos pioneros sobre las relaciones de Estados Unidos con Cuba. LeoGrande es el autor del mejor libro sobre la política de Estados Unidos hacia América Central en los años de Carter y Reagan, y de un ensayo muy perspicaz sobre la política cubana en el Cuerno de África, publicado en 1980, en momentos en que los documentos – de Cuba, Estados Unidos o soviéticos – no habían sido desclasificados. Este ensayo ha resistido la prueba del tiempo y se ha mantenido como la mejor discusión de la política cubana en el Cuerno hasta ahora  -será destronado, después de 35 años, mediante un análisis magistral de Nancy Mitchell en un libro de próxima aparición sobre Carter y África.
Kornbluh y LeoGrande han husmeado todas las fuentes posibles de Estados Unidos para Back Channel:  documentos, entrevistas, memorias inéditas de protagonistas. Es un trabajo impresionante. Su examen de la política estadounidense está bien documentado, bien argumentado y bien escrito. Back Channel es, junto a That Infernal Little Cuban Republic, de Lars Schoultz, con mucho, el mejor estudio que tenemos de las relaciones de Estados Unidos con la Cuba de Castro.
Sólo tengo una reserva sobre Back Channel, la misma que tuve para el excelente libro de Schoultz: no tiene documentos cubanos. Cuando leí Back Channel tuve la misma sensación que tuve cuando leí That Infernal Little Cuban Republic: yo estaba viendo un partido de tenis en el que podía ver sólo a uno de los jugadores, el otro estaba fuera de cámara.
Esto no es culpa de los autores; es la consecuencia inevitable de la obstinada negativa de los cubanos a abrir sus archivos. Para su crédito, ni Schoultz, ni Kornbluh y LeoGrande, nunca pretenden saber más que ellos, una rara virtud entre los estudiosos de las relaciones de Estados Unidos con la Cuba de Castro, que tan a menudo fingen conocimiento de lo que Castro estaba pensando y cuáles eran sus “verdaderas” intenciones. Schoultz, Kornbluh y LeoGrande, por otro lado, sólo van tan lejos como su evidencia les permite.
Tengo un desacuerdo importante con Back Channel. Kornbluh y LeoGrande argumentan que “una de las cosas más llamativas de la larga historia de antagonismo entre Cuba y los Estados Unidos es la frecuencia con que los cubanos han tratado de encontrar una manera de reducir la brecha. … Cada vez que un nuevo presidente asumió el cargo en Washington, Castro le tendió una rama de olivo para ver si la administración – no importa qué tan conservadora o antagónica – podría estar abierta a mejores relaciones”. Esto es justo en el punto. Explican además que para Castro “en ciertos momentos otros intereses superaban claramente las mejores relaciones con los Estados Unidos.” Esto, también es cierto. Pero no estoy de acuerdo cuando agregan que esto se debía a que “Castro calculó que Cuba tenía más que ganar en sus relaciones con Moscú y su posición en el Tercer Mundo, interviniendo en África en la década de 1970.” Esto no es consistente con el historial. En noviembre de 1975, Castro desafió a Leonid Brezhnev enviando tropas cubanas a Angola. En noviembre de 1987, desafió a Mijail Gorbachov al decidir, por su cuenta, expulsar al ejército sudafricano de Angola. Aquí me secundo de Henry Kissinger contra Kornbluh y LeoGrande: en sus memorias, Kissinger explicó que en 1975 Castro había enfrentado a Moscú con un hecho consumado, y corría el riesgo de la ira del Kremlin, porque “era probablemente el más genuino líder revolucionario entonces en el poder.” Castro envió las tropas porque entendía que la victoria del eje del mal – Pretoria y Washington, que participaban en una importante operación secreta paramilitar para imponer sus clientes en Luanda – habría endurecido las garras de la dominación blanca sobre el pueblo de África del Sur. Castro no mantuvo las tropas cubanas en Angola después de 1975 para complacer a los soviéticos sino “para preservar la independencia de Angola” de la agresión de Sudáfrica, como señaló la CIA. En cuanto a la intervención cubana en el Cuerno de África a finales de 1977 para defender a Etiopía de una agresión somalí alentada por el gobierno de Carter, la evidencia de los archivos cubanos y alemanes del Este, así como los documentos soviéticos que han sido desclasificados, muestra que los cubanos creyeron, equivocadamente como se vio después, que “una verdadera revolución” se llevaba a cabo en Etiopía . Fue esta creencia -no la esperanza de ganarse el favor del Kremlin- lo que llevó a Castro a despachar 13.000 soldados cubanos para defender la revolución etíope de la invasión de Somalia. En todo momento lo que impulsó la política de Castro en África era su sentido de misión. Como la CIA ha señalado, era un líder “comprometido en una gran cruzada”.
Obviamente el sentido de misión de Castro no era la única fuerza en la formación de su política exterior, pero era su fundamento. Este sentido de misión -y no el deseo de agradar a Moscú o impresionar a los países del Tercer Mundo – fue el motor de su política exterior y superó el deseo de mejorar las relaciones con los Estados Unidos.
Mi desacuerdo con Kornbluh y LeoGrande en este punto de ninguna manera empaña el hecho de que Back Channel es un tour de force que mejora nuestra comprensión de la política de Estados Unidos hacia Cuba desde 1959.
Fuente: Cubadebate

lunes, 9 de febrero de 2015

El periodismo investigativo arrinconado en EE.UU.




Nunca hubiese pensado que tenía que llevar condones para mi USB, dice reportera.  Retorno al viejo periodismo: notas en papel y encuentros en personas para evitar espionaje electrónico

Por. Jairo Mejia
Las revelaciones de Edward Snowden sobre la Agencia de Seguridad Nacional (NSA) han devuelto a los reporteros a las rutinas del viejo periodismo: notas en papel y encuentros en persona para evitar el espionaje electrónico, no exponer a las fuentes y salvar al periodismo de investigación.
Pesos pesados de los medios estadounidenses reunidos esta semana en Washington denunciaron que, debido al control gubernamental de las comunicaciones, el periodismo de investigación en la era digital se ha convertido en un ejercicio “clandestino” que cada vez hace más complicado acceder a informantes anónimos.
“Hay que recurrir a tácticas de narcotraficante: encuentros en cafeterías, teléfonos móviles desechables o pagos en efectivo”, explicó Jesslyn Radack, abogada experta en casos de filtraciones, ante una sala repleta en el museo periodístico Newseum de Washington, que ha acogido conferencias sobre ese tema.
Las revelaciones sobre la capacidad de la NSA y otras como la británica GCHQ de “pinchar” las autopistas de internet, infiltrarse en servidores y controlar comunicaciones telefónicas han llevado al Tow Center de la Universidad de Columbia a analizar durante un año el “Periodismo Después de Snowden”.
Las revelaciones del extécnico externo de la NSA en el verano de 2013, además de exponer las capacidades técnicas de la inteligencia estadounidense, fueron una prueba más de la guerra cada vez más generalizada de la Administración de Barack Obama y otros gobiernos contra los “whistleblowers” (informantes), que han recibidos duras condenas de cárcel.
Según un estudio del Pew Research Center presentado en las conferencias, dos tercios de los periodistas de investigación estadounidenses dan por hecho de que el Gobierno recopila datos sobre sus comunicaciones, pese a lo cual la mitad no utiliza herramientas para proteger los intercambios con las fuentes.
Desde las revelaciones de Snowden, el porcentaje de periodistas que prefiere encuentros en persona con las fuentes frente al correo electrónico ha pasado del 11 por ciento al 48 por ciento, mientras que no se ha incrementado significativamente el uso de herramientas de encriptación.
“De nuevo las mejores prácticas de reporterismo son las que se utilizaban en la Guerra Fría”, opinó Susan Glasser, editora del diario “Politico”, quien recordó que las agencias gubernamentales operan cada vez más cómodamente en el secretismo. 
En opinión de Morgan Mayhem, director de seguridad digital de First Look Media, los periodistas pueden ser fácilmente víctimas de espionaje electrónico porque “el uso de encriptación no está extendido y si usan esas herramientas quedan marcados como sospechosos”.
“Hace dos años, nunca hubiese pensado que tenía que llevar condones para mi USB (un dispositivo que bloquea el pin de datos en cargadores USB)”, explica Julia Angwin, reportera de ProPublica, una organización sin ánimo de lucro centrada en el periodismo de investigación.
Dean Baquet, editor jefe del The New York Times, uno de los periódicos que, junto con The Guardian y The Washington Post, publicó las filtraciones de Snowden, recordó que los periodistas que cubren asuntos de seguridad nacional toman más precauciones para proteger a sus fuentes, algo que no ocurre en el resto de disciplinas.
“Hay muchísima información sin declarar, sin descubrir que tiene que ser trabajada por periodistas”, afirmó Baquet en una sala repleta de los mejores periodistas de investigación de Estados Unidos.
Snowden, refugiado en Rusia; Chelsea Manning, condenada a 35 años de cárcel por filtraciones diplomáticas y de defensa; John Kiriakou, ex agente de la CIA que reveló programas de tortura; y más recientemente Jeffrey Sterling, ex espía declarado culpable de filtraciones después de poner al borde de la cárcel a un periodista al que supuestamente contactó, son ejemplos de la mayor presión gubernamental contra las filtraciones.
Un año y medio después de la osada filtración de Snowden, que reveló programas secretos de espionaje masivo, todos los documentos que obtuvo descansan en un ordenador sin conexiones en una habitación de la redacción de The New York Times.
Y, como dijo Marty Baron, editor jefe de The Washington Post, por responsabilidad y seguridad nacional algunos detalles de esos documentos nunca se conocerán.

martes, 3 de febrero de 2015

Radio y TV Martí han invertido un millón de dólares en contratos desde el 17 de diciembre



La Oficina de Transmisiones para Cuba (OCB) del gobierno de EEUU ha firmado más de 100 contratos por valor de casi 1 millón de dólares para sus transmisiones hacia la Isla, desde el 17 de diciembre de 2014, fecha en que EEUU anunció que comenzaría a renovar los lazos diplomáticos.
De acuerdo con datos publicado por el periodista Tracey Eaton, en su blog Along the Malecon, los registros muestran que una parte del dinero se destinó a Phoenix Air Group, la empresa contratista dueña de Aero Martí, un avión que no vuela a ninguna parte pues está varado en un almacén. Aero Martí estaba destinada a difundir un canal de televisión hacia Cuba para “promover el cambio de régimen”, pero los cubanos atascaron la señal y el avión terminó en tierra.
Sin embargo, dice Eaton, la OCB ha pagado al Phoenix Air Group 4 087 706 dólares desde el 1 de junio de 2010.
La agencia sigue gastando dinero de los impuestos de los contribuyentes estadounidenses en el almacenaje de Aero Martí, en momentos en que la deuda nacional supera los 18 billones de dólares y el déficit del presupuesto federal excede los 478 mil millones de dólares (Véase National Debt Clock).
No obstante, el dinero gastado en Aero Martí es una pequeña fracción del presupuesto de la OCB, que fue de 26,3 millones de dólares en el año fiscal 2013.
El 28 de enero, Raúl Castro exigió al gobierno de Estados Unidos que deje de transmitir señales de televisión y radio en Cuba, debido a que estas violan el derecho internacional. El Presidente cubano dijo en la Tercera Cumbre de la CELAC en Costa Rica:
Como he afirmado reiteradamente, Cuba y Estados Unidos debemos aprender el arte de la convivencia civilizada, basada en el respeto a las diferencias entre ambos gobiernos y en la cooperación en temas de interés común, que contribuya a la solución de los desafíos que enfrentan el hemisferio y el mundo.
Pero no se debe pretender que, para ello, Cuba tenga que renunciar a sus ideales de independencia y justicia social, ni claudicar en uno solo de nuestros principios, ni ceder un milímetro en la defensa de la soberanía nacional.
Tomado de Along the Malecón.